viernes, 22 de abril de 2011

Jueves 21 DE PIE Y COCINANDO (I)

Hemos suplantado a a este invierno
que aparentaba ser  inaccesible y tardío
en el réquiem de tesones sin determinar,
sin amanecer ni un solo día sin la plasticidad del retozo,
el mismo que oscila entre las luces prematuras
de un afrutado bodegón de corolarios.

Hemos aprendido a ser este descaro de la piel
tan lejano de afligirse
y que enloquece de frescura
cuando sabe  la mesura de transcribirse en pedazos,
tantas veces como se derrumben los espacios en blanco
en la singular escuela del desgarro a quemarropa.

Hemos hecho de un contagio amortajado
el paralelo de las noches enrocadas,
un hueste de pasiones ostensibles
que se atempera  como anillo en el cuello.